El Atlético de Madrid podría tener un mercado de verano interesante en lo que a refuerzos y salidas se refiere. Con las posibles salidas de Morata, Cunha y Félix, en el Cívitas Metropolitano podría caer una gran suma de dinero que se reinvertiría en reforzar la plantilla. Reguilón no seguirá (está cedido por el Tottenham) y se necesita doblar posición, ya sea en defensa de tres o de cuatro, es decir, independientemente de la llegada de un lateral o carrilero izquierdo, esa zona exige un retoque (e incluso dos si acaba saliendo Carrasco) en forma de incorporación
Con otras zonas del campo con incógnitas, la defensa es la base de la filosofía de Simeone. Con la portería a buen recaudo con Oblak pese a que esté lesionado, los centrales también son una incógnita, especialmente Witsel, y en la parcela media habrá que ver qué ocurre con Kondogbia, que tiene pie y medio fuera del equipo después de los pocos minutos que está disputando.
A coste cero y en su mejor momento, el portugués es el elegido
El ex-jugador del Lorient se ha desarrollado en la Ligue 1 y actualmente juega en la Bundesliga, al menos hasta junio. En el mejor momento de su carrera, es agente libre y podría ser jugador del Atlético de Madrid en los próximos meses. El colíder de la división de honor alemana no quiere darlo por perdido, pero por si acaso ya ha firmado a Rami Bensebaïni, del Borussia Mönchengladbach, de cara a la próxima temporada.
El franco-portugués lleva tres goles y doce asistencias esta temporada en el fútbol alemán, y con 29 años aún tiene fútbol que dar. Puede jugar de lateral, carrilero o incluso mediocentro si así lo precisase el entrenador. Su guante en la pierna izquierda lo hace un futbolista estelar tanto a balón parado como en los metros finales del terreno de juego.
Su perfil casa, pero no está hecho
Los de Westfalia lucharán hasta el último minuto del último día para retener al jugador, pero su actuación no ha pasado desapercibida para algunos clubes, y es un perfil que Simeone busca: Lateral todoterreno, con llegada al área y que no suponga un desembolso desorbitado. Otra alternativa que se maneja desde Madrid es la de Pacha Espino, de características similares.