El Sevilla ha resucitado con José Luis Mendilíbar. El técnico vasco, que se mueve como pez en el agua en contextos clasificatorios complicados, ha reenganchado al equipo con su mejor versión.
Enfocados en terminar la liga lo mejor posible y en superar a la Juventus de Turín en las semifinales de la Europa Lesgue, donde eliminaron al Manchester United, la dirección deportiva ya trabaja en los refuerzos de cara a la próxima temporada.
Un fichaje en propiedad que puede peligrar
El Sevilla recibió en enero la cesión de Loïc Badé procedente del Stade Rennais. Los franceses cortaron su cesión al Nottingham Forest por la falta de minutos, cediéndolo en invierno al club hispalense, donde ha caído de pie.
Según diversas informaciones, los andaluces harán efectiva la opción de compra de 12 millones que tenían, y deberían apresurarse, ya que desde Inglaterra aseguran que el Tottenham Hotspur, inmerso en una crisis, estaría interesado en el jugador para reforzar su defensa.
Un fichaje cerrado y otro al caer
El fichaje que sí está cerrado es el de Federico Battoni, central o pivote argentino, aunque se prevé que se oficialice próximamente la llegada a coste cero de Adrià Pedrosa, lateral izquierdo del RCD Espanyol.
