El Bernabéu primero y Stamford Bridge después dictarán uno de los cuatro semifinalistas de esta edición de la máxima competición continental de clubes, repitiéndose esta eliminatoria por tercera vez y con global de la ronda empatado (una victoria para los londinenses en semifinales y otra para los madrileños en cuartos de final) entre ambos equipos.
Además, habrá morbo por los diferentes futbolistas que han vestido la camiseta del rival: Kovačić por parte de los ingleses y Courtois, Hazard y Rüdiger como representantes de los madridistas en el campo, ya que Ancelotti también entrenó en Stamford Bridge.
Otra gran noche de Champions
Madrileños y londinenses volverán a verse las caras, de nuevo en cuartos de final, pero con las tornas cambiadas: La vuelta será en Londres, donde se consagró Karim Benzema tras anotar un hat-trick en la ida del año anterior.
En el banquillo del Chelsea habrá muchos millones invertidos y, sobre todo, una cara nueva que conoce el club y la Premier: Bruno Saltor, español y leyenda del Brighton, será el encargado de dirigir a los de Fulham hasta final de temporada, donde se buscará un proyecto sólido y convincente desde cero tras la destitución de Tuchel primero y Potter después.
La Champions: Un clavo ardiendo
A expensas de lo que pase en el Clásico de Copa del Rey que se disputa en el Camp Nou, el Real Madrid tiene otra nueva oportunidad para ampliar todavía más sus vitrinas. Con la Liga prácticamente decantado hacia el FC Barcelona, los blancos saben que pueden maquillar (y de qué manera) la temporada levantando la decimoquinta Copa de Europa de su historia.
Para su rival, la urgencia de ganar algo es aún mayor: Con la Premier perdida hace meses y fuera de las dos copas (y posiblemente de Europa la temporada que viene), la "orejona" se abre como un oasis en medio del desierto para salvar una temporada nefasta donde nunca estuvieron a la altura.