Tras los test en Bahréin, Red Bull es el equipo a batir junto al campeón del mundo, Max Verstappen. El RB19 ha nacido con escasas diferencias con respecto a su antecesor, pero las evoluciones han sido suficientes para mantenerse en el puesto de favoritos.
Con el techo presupuestario, la escudería austriaca no ha podido usar el túnel de viento todas las horas que le hubiera gustado. Aun así, el coche se ve rápido tanto a una vuelta como en tandas largas.
El éxito de Red Bull
El RB19 es el monoplaza que más cerca del suelo se encuentra. Esta característica le permite ganar mayor velocidad sin la problemática del año pasado: el mítico "porpoising"
"Son diez milímetros más bajos que todos los demás. Si pilotamos tan bajo, la parte inferior de la carrocería se rompería", ha comentado un portavoz de Mercedes a Auto Motor and Sport.
Mercedes asegura que en esta acción esta la velocidad del Red Bull. Hasta cuatro décimas puede sacar este coche ante sus máximos rivales. En contrapuesta, el equipo de la estrella busca solucionar problemas en su monoplaza relacionados con la altura del suelo y el rebote.
"Ese fue el mayor problema el año pasado, la mayor parte del rebote ha desaparecido, pero a veces todavía está. Las cosas son mucho mejores, pero tenemos algunos aspectos en los que trabajar, todavía no es perfecto y no podemos igualar a Red Bull o Ferrari actualmente", ha expresado Hamilton por su parte.
