Tras un inicio en la sombra, la serie no ha despuntado suficiente hasta confirmar el fracaso por parte de la propia Netflix
Desde su estreno en Netflix, el director Alex Pina ha tenido siempre con White Lines la misma esperanza que una persona para sentirse amada por un amor no correspondido pero, como en la mayoría de estos casos, ha terminado en fracaso estrepitoso. Un final que llega como respuesta a las numerosas acciones que ha tenido la plataforma con el thriller con toques de comedia negra, llegando incluso a que la apunten como principal causante del bacatazo.
La serie fue estrenada por Netflix con poco relumbrón, llegando incluso a carecer de una repercusión propia de una producción que cuenta en su elenco con Juan Diego Botto y Marta Milans, entre otros. Fue una seña que levantó sospechas en cierto sector por el inesperado trato de la compañía a la nueva serie del director de La Casa de Papel.
Tanto Alex Pina como las productoras implicadas en White Lines habían confirmado querer continuar la serie con una segunda temporada. Esta nueva entrega de episodios que se sumaría a los ya emitidos 10 capítulos que forman la primera temporada, disponible en Netflix. Un deseo que no llegará a ver la luz tras los últimos acontecimientos.
“Es con gran pesar que publico que el barco para una segunda temporada de White Lines ha zarpado”
Pero el anuncio que hizo trizas esas ilusiones llegó, no siendo Netflix quien lo ha sacado a la luz. Sino uno de los protagonistas de la serie, el DJ que traficaba con droga en Ibiza. El actor Daniel Mays ha sido quien, con una publicación en su perfil de Instagram revelaba la nefasta noticia con el mensaje “Es con gran pesar que publico que el barco para una segunda temporada de White Lines ha zarpado”.
La noticia no ha sentado especialmente bien en Alex Pina, quien tenía aún esperanzas puestas en la serie. Un deseo de éxito que parece haber sido destruido de un plumazo tras no mostrar interés Netflix en la segunda temporada. Una información que confirma el poco ímpetu de la plataforma en la nueva obra del creador de La Casa de Papel.
Algo que también ha generado una debacle en la atención de los espectadores a esta serie de Netflix en el período de confinamiento. Un espacio de tiempo en el que esperaban sufriese un repunte en la aceptación de White Lines por parte del público, lo que nunca ocurrió. Con ello, acaba el último proyecto estrenado de Alex Pina.