Messi vuelve a sonreir sin Luis Suárez en el retorno del Barcelona
Ansu Fati se presenta como la perla del Barcelona en una vuelta a la Liga que ha demostrado algo: Koeman ha instaurado el cambio
Con una goleada de cuatro a goles a cero, el Barcelona ha ganado en su primer partido de Liga venciendo a un gran Villareal que acabó pisoteado por el conjunto azulgrana. Con un nuevo once presentado de la mano del entrenador holandés, el Barça no tenía la confianza de sus aficionados al 100% asegurada por todas las dudas y el verano vivido… pero siempre hay esperanza.
Ansu Fati ha sido el hombre del partido sin ninguna duda. La versatilidad del joven ilusiona no solo a los aficionados del Barcelona, sino que a todo aficionado de este deporte. Con tan solo 17 años demuestra un talento indudable pero que a la vez hay que ser cautos. Es muy joven y le queda una trayectoria larga por vivir, aunque no podemos obviar lo evidente: tiene sabor a futura estrella.
También pudimos disfrutar de la nueva visión de juego del equipo con el doble pivote, inicialmente encabezado por Sergio Busquets y Frenkie De Jong, aunque después tuvimos el estreno de Pjanic para acompañar al holandés. Otros de los estrenos que vivimos fueron el de los jóvenes Trincao y Pedri, dos perlas que ilusionan en Barcelona de una manera espléndida por su luz y talento.
Calma y tiempo es lo que pide Koeman con Ansu Fati
El partido empezó con la posesión clara del Barcelona, donde pudimos observar también el retorno de Coutinho después de su cesión en el Bayern de Munich. ¿Qué podemos comentar del brasileño? Que ir un año cedido al actual campeón de Europa le ha sentado como anillo al dedo. Nos hizo recordar al Coutinho del Liverpool y eso, para el Barça, es una gran señal dentro de la temporada que le espera.
Sergio Asenjo evitó que la goleada fuese a más, haciendo grandes paradas tanto a Trincao, como a Messi y Coutinho. Obviamente estamos delante del primer partido, nos espera una temporada larga y dura pero el Barcelona ha empezado con un buen sabor de boca. Un elemento a tener en cuenta es como Koeman ha sabido llevar los tiempos del partido.
El Barcelona llevaba varias temporadas con entrenadores que no sabían aprovechar los cambios para darle un aire fresco al partido, y hoy Koeman le dio la vuelta a esta leyenda. Un partido ilusionante y con figuras claves, aquellas que forman parte de la famosa revolución que se lleva pidiendo años tras años y parece, parece, que puede estar empezando a tomar forma de verdad.